En conferencia de prensa, en el marco de su visita a México, Michelle Bachelet puntualizó “Tenemos que ir con esa neutralidad para conversar con todas las partes y eso es lo que yo realmente quiero cuidar: la objetividad, la neutralidad. No ser parte de ningún otro tipo de estrategia. Nuestro rol es ser independientes, imparciales, objetivos, no selectivos”.
Y es que en reiteradas ocasiones la oposición venezolana, que empuja la salida anticipada del presidente Nicolás Maduro, ha solicitado una visita por parte de la Alta Comisionada ante la crisis política que vive la nación sudamericana y en la que según cifras de la ONG Foro Penal hay alrededor de 200 “presos políticos”.
“Tampoco somos una oficina que va a resolver la crisis política. Nosotros con Naciones Unidas llamamos al Gobierno y a la oposición a dialogar una salida política y no una salida de fuerza y que sea una salida del pueblo venezolano”.
Esto en referencia a las declaraciones hechas por el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guiadó, quien se ha negado a descartar una posible intervención militar estadounidense con tal de sacar a Maduro del Palacio de Miraflores.
Bachelet señaló que si bien el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos no tiene oficina en Venezuela, el organismo de la ONU realiza monitoreos desde Panamá. “Pero lo que hacemos es que monitoreamos desde la oficina de Panamá en consulta con sociedad civil, con familiares, con víctimas, y después hacemos los reportes, como se hacen todos los reportes y cada vez que es necesario nosotros hacemos declaraciones públicas”.
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