El fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, descubrió que en lugar de hacer una acusación que integrará todos los casos, por tratarse de una operación articulada, se hizo caso por caso.
En entrevista con Raymundo Riva Palacio para el programa Estrictamente Personal, Gertz señaló que en el caso específico de la Estafa Maestra «no es posible que se haya hecho un fraude al país del tamaño de los miles de millones de pesos que se robaron y que sean casos específicos, sueltos, que no tienen que ver el uno con el otro, eso no lo puede hacer nadie, por la cantidad de instituciones que tienen que ver en el sistema de control de auditoría y de seguimiento de los presupuestos y actividades».
«Los judicializan como casos independientes unos de otros, y la discusión de los jueces es si realmente se podía hacer un contrato con una universidad para que hiciera una tarea, es de sentido común, las universidades están hechas para la enseñanza, para la investigación científica, pero no para contratos específicos de servicios de carácter general. ¿Quién puede creer eso?», agregó el fiscal.
Al dar a conocer el informe general de la FGR a 100 días de operaciones, Gertz señaló que en el caso de la Estafa Maestra se va a castigar con nivel de crimen de Estado, sin embargo, ya hubo dos casos en el que los jueces no encontraron pruebas suficientes para castigarlos.
En el caso Odebrecht se comprometió a que antes del próximo bimestre “se habrá de empezar a judicializarlo” bajo la óptica de una maquinación delictiva en materia de delincuencia organizada. «La ley específica señala que cuando hay una coalición de individuos con objeto de cometer un delito, esa hipótesis la debe investigar la Fiscalía y en este caso evidentemente no puede ser el delito de una sola persona, porque el origen mismo de toda esa actividad delictiva está clarísimo desde que los americanos la descubrieron», dijo.
“Evidentemente es un complot, es una organización que se hizo para poder obtener una serie de beneficios económicos a costa de los países”, agregó.
En otros temas, refirió como “escabrosa” la herencia de 300 mil expedientes de casos sin resolver, que dejó la extinta PGR. “Estuvo bastante escabroso, tuve que ver 300 mil carpetas, algunas vienen desde los años 80, son averiguaciones previas que ahí estaban, que no se hacía lo que se tenía que hacer”.
Indicó que los expedientes le fueron heredados y que los casos se investigaban según la conveniencia y conforme a intereses determinados, sin ningún tipo de seguimiento a protocolos y procedimientos normativos.
Refirió que el rezago es “injustificado”, “no es pretexto que no había dinero”, puso como ejemplo que en octubre de 2013, la dependencia adquirió un avión Bombardier Challenger 605 transcontinental, con un sobre precio que ascendió a 19.5 millones de dólares cuando el valor real era de 15 millones de dólares.
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