Ciudad de México.- Las amenazas del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, de estar dispuesto a decir cuáles fueron los funcionarios involucrados en la compra de una planta de fertilizantes, como parte de las investigaciones que se le siguen por posibles actos de corrupción, tuvo un destinatario disfrazado, el expresidente Enrique Peña Nieto.
Peña Nieto toleró que varios de sus más cercanos armaran negocios para beneficiarse de la Reforma Energética, aunque cuidando no aparecer.
Uno de ellos, o cuando menos, uno sobre el cual hay pistas para saber si resultó beneficiado, es Luis Miranda, compadre del expresidente y actual senador.
Dentro del equipo de defensa de Emilio Lozoya han dejado correr la versión de que existe una grabación en poder de él que entregará a las autoridades, donde se puede corroborar su dicho.
No se sabe, si existe o no la grabación, pero de que Enrique Peña Nieto, dicen los que saben, anda bastante nervioso, no hay duda.
viernes, 14 de junio de 2019
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