lgunas de estos Empresas que Facturan Operaciones Simuladas (EFOS), como los llama el SAT, podrían haber incurrido en el desvío de recursos, por lo que fueron denunciadas.
Además, la oficina tributaria detectó, en otra investigación, que doce de sus funcionarios creaban empresas fantasmas desde el interior de la dependencia, por lo que ya fueron cesados y se investigan cada uno de los casos.
El pasado 20 de junio, el SAT realizó un operativo en la que se encontraron a 150 EFOS que han facturado alrededor de 282 mil millones de pesos, tan sólo en los últimos dos años, lo que representa una posible evasión fiscal de 62 mil millones de pesos.
Por esto, envió oficios a notarios públicos y a directores generales de registros públicos relacionados con estas 150 empresas, que son investigadas por la venta de facturas falsas, y se está remitiendo a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) los datos para detectar transferencias inusuales.
Desde 2014, se ha aumentado a 8 millones 827 mil 390 facturas falsas, lo que significa un monto de operaciones de un billón 611 mil 418 millones de pesos, y una presunta evasión de 354 mil 512 millones de pesos, similar al 1.4% del PIB.
Ríos Farjat reveló que es la Ciudad de México la entidad que presenta la mayor cantidad de EFOS, dado la densidad poblacional, seguida de Jalisco, Nuevo León y Veracruz.
Reveló que tanto las empresas que venden las facturas falsas, como quienes las adquieren y realizan la deducción, son investigados. Porque de las primeras se obtiene información y de las segundas se puede recuperar la recaudación.
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