El informe fue elaborado para analizar la evolución patrimonial del expresidente y determinar, entre otras cosas, si coincidía o no, lo que percibió con lo que declaró fiscalmente y en sus declaraciones patrimoniales. El resultado: no hay coincidencia.
El ejercicio realizado por el medio es una práctica que se lleva a cabo en personajes de interés dentro de la Secretaría de la Función Pública (SFP).
De acuerdo con el expediente número 142/2007 de la SFP, hay irregularidades en las declaraciones fiscales del entonces mandatario. La suma total de las inconsistencias en las declaraciones de Fox asciende a 5 millones 862 mil 151 pesos.
En 2003 la SFP señala que las inconsistencias en la declaración corresponden a un monto de 3 millones 147 mil 46 pesos. Que se reparten de la siguiente manera, en cuanto a los ingresos por concepto de honorarios de servicios profesionales el monto es de 267 mil 296 pesos. El presidente no manifestó el reembolso de capital del Cerrito por 2 millones 700 mil pesos y en intereses de la declaración patrimonial Fox Quesada reportó 179 mil 750 pesos más que en la declaración fiscal.
En la declaración de modificación patrimonial del 9 de mayo de 2005, que corresponde al ejercicio fiscal de 2004, se observaron diferencias por aclarar en cuanto a los ingresos por concepto de honorarios de servicios profesionales por un monto de 290 mil 539 pesos, así como en el rubro de recuperación de préstamo personal/venta de acciones por dos millones 274 mil 224, que no fueron declarados; y en la declaración patrimonial se reportaron 150 mil 342 pesos más que en la declaración fiscal. En total en 2004 el presidente acumula irregularidades por un monto de 2 millones 715 mil 105 pesos.
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