Se esperaban nuevas conversaciones entre los negociadores ucranianos y rusos para aliviar la crisis el martes, después de que las discusiones del lunes a través de un vídeo terminaran sin que se anunciaran nuevos avances.
Dos potentes explosiones sacudieron la capital, Kiev, antes del amanecer, y se escucharon sirenas de ataque aéreo en diferentes regiones, como Odesa, Chérnigov, Cherkasy y Smila.
Los servicios de emergencia dijeron que dos personas murieron al ser atacado un edificio de apartamentos en Kiev.
Miles de personas han muerto en intensos combates y bombardeos desde que el presidente ruso Vladimir Putin ordenó la invasión de Ucrania el 24 de febrero.
Rusia califica sus acciones de "operación militar especial" para "desnazificar" el país y evitar un genocidio, una afirmación que Estados Unidos y sus aliados rechazan como pretexto para un ataque injustificado e ilegal.
Según autoridades estadounidenses, Rusia ha pedido apoyo militar y económico a Pekín, que ha señalado su disposición a prestar ayuda.
Moscú lo niega, diciendo que tiene recursos suficientes para cumplir todos sus objetivos. El Ministerio de Asuntos Exteriores de China ha calificado las informaciones sobre la ayuda de "desinformación".
"Hemos comunicado muy claramente a Pekín que no nos quedaremos de brazos cruzados", dijo el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, a los periodistas después de que el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, se reuniera con el máximo diplomático chino, Yang Jiechi, en Roma. "No permitiremos que ningún país compense a Rusia por sus pérdidas".
La reunión de siete horas fue "intensa" y reflejó "la gravedad del momento", según un responsable estadounidense.
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