En el artículo se destaca que el Gobierno de México debe atender el asunto con urgencia, donde deben regular los servicios de inteligencia, acusando poca supervisión de las instituciones como la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
“Dado el papel cada vez mayor de las Fuerzas Armadas en México, es realmente crucial y urgente que los servicios de inteligencia en México estén regulados con un mecanismo de supervisión civil”, que “debería crearse para controlar y, eventualmente tomar medidas de rendición de cuentas sobre los mismos”, afirmó Marta Hurtado, portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos al diario estadounidense.
Otro de los puntos destacables del reportaje fueron los señalamientos donde la Sedena está controlada por un general en servicio activo, no de un líder civil, quien se niega a comparecer frente al Congreso de México para responder preguntas.
Además, durante el gobierno de Andrés Manuel, fueron asignadas a las Fuerzas Armadas diferentes obras como la construcción y administración del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, así como el Tren Maya.
“Las Fuerzas Armadas construyeron y en la actualidad operan el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, y están construyendo gran parte del proyecto turístico más grande del país, el Tren Maya, cuya ruta comprende casi 1600 kilómetros y tiene un costo de 20 mil millones de dólares, el cual también administrarán una vez terminado. También están a cargo de las aduanas del país, unas de las mayores fuentes de ingreso de México, que en 2022 tuvo previsto generar 59 mil millones de dólares”.
Estas acciones fueron señaladas como una estrategia de AMLO para evitar la transparencia y se ha traducido en que los casos de muertes de civiles a manos del ejército casi nunca vayan a juicio.
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