En su más reciente parte sobre este tema, muy sensible en Cuba debido a que la mayoría de los migrantes son personas con calificación profesional, el Minint dijo que de enero al mes pasado se realizaron desde Estados Unidos “50 operaciones marítimas de retorno de ilegales con dos mil 949 personas”.
La institución agregó el sábado que en las últimas horas” fueron devueltos por las autoridades de Bahamas otros 38 ilegales” y afirmó que en lo que va de año cuatro mil 30 han corrido similar suerte desde ese país, Estados Unidos, México e Islas Caimán.
Agregó que “Cuba mantiene su firme compromiso con una migración regular segura y ordenada, al tiempo que ha reiterado el peligro y condiciones de riesgo para la vida que representan las salidas ilegales del país por mar y el involucramiento irresponsable de menores”.
Desde que controló la pandemia de covid-19 hace poco más de un año, Cuba ha visto agudizarse la crisis económica que comenzó desde 2019, principal motivo de la ola migratoria que padece.
En este contexto, el medio digital estadunidense Progreso Semanal informó que suman “380 mil los cubanos que esperan en la isla por el famoso Parole”, como se conoce al nuevo sistema de entrega de visas adoptado por Estados Unidos en enero para frenar el flujo migratorio por su frontera con México.
En tanto, la embajada de Estados Unidos en la isla dijo que hasta mayo pasado fueron entregados a los cubanos “29 mil permisos” acorde al nuevo sistema, que implica solicitar la visa por vía on line y tener en el país norteño a alguien que se comprometa oficialmente como “patrocinador” del migrante.
Esos permisos son para trabajar por dos años, pero en virtud de la Ley de Ajuste Cubano los procedentes de la mayor isla del Caribe pueden optar por la residencia después de cumplido ese tiempo.
Los cubanos capturados en el mar y devueltos a la isla, no pueden optar por el nuevo sistema.
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