“Este jueves, la disponibilidad del servicio eléctrico nacional a las 07:00 horas era de dos mil 100 MW y la demanda de dos mil 235 MW. Desde las 02:24 horas de la mañana se comenzó a afectar el servicio y se estima que la situación se mantenga durante todo el día”, puntualizó la UNE.
Por su parte, el ministro dijo que a causa de las sanciones económicas de Estados Unidos y el temor a sufrir represalias, algunas empresas extranjeras han renunciado a hacer negocios con su país.
“Somos los que más caro compramos el combustible en el mundo”, afirmó.
Cuba padece desde hace más de dos años una situación tensa en la generación de electricidad, realidad que afecta la producción de bienes y servicios y es causante de un creciente malestar social, que ha generado manifestaciones callejeras contra el gobierno.
De la O Levy aseguró que en estos momentos “el país cuenta con la potencia necesaria” para estabilizar el servicio eléctrico, pero apuntó que la falta de combustible, “sobre todo de diésel, ha complicado la generación”.
Cuba dispone de ocho termoeléctricas y 20 unidades de generación que consumen petróleo nacional; ha contratado a una empresa turca varias plantas flotantes; y completa ese esquema con motores que se alimentan de diésel y fuel oil, afectados ahora por la intermitencia en el suministro de esos combustibles importados.
Tenemos objetivos en común con Cuba el equilibrio de la producción, la salud y el medioambiente
Por la inestabilidad en la producción de electricidad, el gobierno acordó la víspera un estricto plan de ahorro que implica hasta “el aplazamiento de actividades económicas que no son fundamentales”, en tanto en todo el país prosiguen los cortes del servicio eléctrico y las largas filas de automovilistas a la espera de comprar gasolina.
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