En su primer periodo de pruebas decenas de porteños se dieron cita en la estación para tomarse fotografías y ser testigos del momento de salida de la máquina, serie FIT-1001, conformada por tres vagones.
Los vagones lucen del lado izquierdo una mujer con traje típico jarocho, mientras que del derecho aparece otra mujer portando el traje de tehuana, característico de algunos municipios del Istmo.
La locomotora arribó a Salina Cruz alrededor de las dos de la mañana del domingo, procedente del Coatzacoalcos y su retorno ocurrió antes de las 10 horas en medio de la expectación de las nuevas generaciones y la añoranza de las personas adultas mayores.
Personal de la Marina se encargó del resguardo del área mientras los maquinistas realizaron los ajustes, previo al retorno.
En su momento, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció será el 17 de septiembre cuando él participe en el primer viaje oficial, eventualmente, lo abordará en Salina Cruz y descenderá en Coatzacoalcos.
El tren de pasajeros conectará a los dos puertos, localizados en los océanos Atlántico y Pacífico, una distancia de 300 kilómetros, lo que sin duda será una posibilidad de viaje e inversión en este punto del sureste mexicano.
La máquina y vagones eran anteriormente propiedad del gobierno de Puebla, conocido como el tren turístico, pero que fue adquirido por la Secretaría de Marina.
Es de recordar que el pasado 29 de agosto, el tren carguero del Istmo arrancó las primeras pruebas por la vía rehabilitada de 212 kilómetros, de la comunidad de Medias Aguas, Veracruz a la ciudad de Salina Cruz.
El primer recorrido del tren carguero transportó 10 tolvas con cemento y dos tanques con ácido fluorhídrico, peso suficiente para los nuevos rieles, durmientes y el balastro sustituido durante el último año, después de décadas de abandono.
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