Mexiquenses desquician CDMX por bajo nivel de agua en presa de Valle de Bravo

CDMX, 14 febrero 2024. A las quejas locales por crisis de desabasto de agua que atraviesa la Ciudad de México, se sumaron las protestas de los mexiquenses que desquiciaron la avenida Insurgentes Sur por más de tres horas. Desde la madrugada del 13 de febrero partieron con rumbo a la capital cerca de 500 habitantes del municipio de Valle de Bravo, en el Estado de México, para exigirle a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) un rescate de la presa Miguel Alemán.

Con pancartas con leyendas como “exigimos la liberación del agua secuestrada”, “no es sequía, es saqueo” y “te reto a que tu economía dependa de un lago que están sobreexplotando”, los mexiquenses se plantaron afuera de la sede de la Conagua para pedir que se revierta el bajo nivel que registra, la eliminación de lagos particulares y declarar patrimonio de la humanidad al lago, pues el embalse alcanza un tercio de su capacidad en el marco de la peor crisis del Sistema Cutzamala.

La presa de Valle de Bravo es uno de los tres embalses que alimenta al Cutzamala, sistema del que depende cerca del 30% del agua que se suministra en la CDMX y alrededor del 25% de la que llega a toda la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM). De acuerdo con el Sistema Nacional de Información del Agua, hasta el corte del 12 de febrero de 2024, el embalse registró un porcentaje de llenado del 32.51%.

El 9 de febrero, la Conagua indicó que en conjunto con los gobiernos de la CDMX y del Edomex; así como con el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) y la Secretaría del Agua del Estado de México, continúan obras y acciones para aumentar el caudal en las presas del Cutzamala. No obstante, ninguna de estas parece evitar el inevitable día cero de este sistema, cuyo nivel más bajo se pronostica para finales de junio.

Las protestas se retiraron minutos después de las 11 horas de este martes, luego de que una comisión de la dependencia federal pactara una visita a Valle de Bravo para instalar una mesa de diálogo y pactar soluciones con los mexiquenses.

Los manifestantes pidieron la intervención de autoridades federales, pues denuncian la existencia de poco menos de 300 lagos clandestinos a costa de la presa Valle de Bravo, los cuales son usados para sustraer y comercializar el agua en el contexto de la sequía severa y extrema que está repercutiendo en los problemas de desabasto de agua en el Edomex y la CDMX.

Según los manifestantes, la Conagua ha permitido la construcción de pozos y lagos de uso particular, mientras localidades como Colorines y El Arco no tienen agua potable.

Los recortes en el suministro del Sistema Cutzamala por la sequía en gran parte del país afectan principalmente a 13 alcaldías de la CDMX y a 16 municipios del Edomex.