Alito Moreno reacciona a la renuncia de Cynthia López Castro del PRI

CDMX, 30 octubre 2024. En medio de un ambiente turbulento, la renuncia de Cinthya López Castro, senadora del partido, ha provocado un aluvión de reacciones y ha puesto de relieve las tensiones internas que enfrentan los priistas. La legisladora decidió abandonar su militancia en el PRI después de ser acusada de facilitar la aprobación de la reforma de “supremacía constitucional”, un tema que ha generado un intenso debate en el país.

El jueves pasado, durante una crucial votación sobre la reforma, López Castro se ausentó, lo que suscitó la ira de su líder, Alejandro Moreno, conocido como “Alito”. En una conferencia de prensa, Moreno no escatimó en palabras para expresar su descontento, afirmando que la senadora no había presentado justificación alguna para su ausencia, lo que constituyó una infracción al reglamento del grupo parlamentario.

“Es una acción de indisciplina”, subrayó Moreno, mientras explicaba que, según el artículo 11 de los reglamentos internos, quienes no apoyan las decisiones de la mayoría son susceptibles de ser expulsados. Esta normativa, aplicada rigurosamente, refleja la seriedad con la que el PRI maneja su cohesión interna, especialmente en momentos de gran controversia.

La reacción del partido a la renuncia de López Castro es emblemática de la cultura política del PRI, donde la lealtad al grupo y a las decisiones colectivas son fundamentales. “Las y los senadores nos reunimos en la sala de juntas y en ese momento se decidió por el grupo separarla”, añadió Moreno, enfatizando la importancia del voto unificado en temas constitucionales.

Esta situación pone de manifiesto la lucha de poder dentro del PRI y la presión que sienten los legisladores para alinearse con la dirección del partido, especialmente en un contexto donde las reformas impulsadas por el gobierno de la 4T han sido objeto de feroz oposición por parte de la oposición.

La reforma de “supremacía constitucional” ha sido interpretada por muchos como un intento de consolidar el poder del gobierno en detrimento de la independencia de los poderes. Las críticas apuntan a que esta reforma podría debilitar la separación de poderes, lo que ha generado un ambiente de incertidumbre en el ámbito político.

La renuncia de Cinthya López Castro, lejos de ser solo un evento aislado, se convierte en un símbolo de las divisiones internas dentro del PRI y de la compleja dinámica entre la lealtad al partido y la presión por representar a sus electores en un marco de reformas controvertidas.